PATAGONIA SILVESTRE
Montañas

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FITZROY FLAMINGO MORENO

El espectáculo de los picos nevados de la cordillera de los Andes elevándose sobre la planicie, lleva a la mente la formación de la Tierra. La gigantesca grieta que dividió a la superficie terrestre en erupciones volcánicas fue cubierta de hielo hace millones de años. Ese período de glaciciones, junto con el proceso viviente de la formación de un glaciar, se manifiesta a todo lo largo de los Andes patagónicos, haciéndose más evidente en el Parque Nacional Los Glaciares.

En tanto que la mayoría de los galciares del paneta han estado retrocediendo desde el final de la Edad de Hielo, hay unos pocos que contínuan avanzando debido a las peculairidades de su ubicación y las condiciones climáticas y atmosféricas que los rodean. Patagonia es una zona donde estas condiciones existen en una región donde también se hallan volcanes en el norte, en el Parque Nacional Lanín, una verdadera tierra de hielo y fuego. Más recientes son arroyos y lagos de aguas profundas de origen glaciar que en la baja montaña conforman el distrito de los lagos de Bariloche y hacia el sur, el Parque Nacional Los Alerces, donde se hallan en pie algunos de los árboles más viejos de la Tierra.

Estas montañas y bosques crean un habitat para criaturas únicas y propias del lugar. De los dos ciervos nativos de la Patagonia, el evasivo pudú, el ciervo más chico del mundo, habita densos cañaverales, y el huemul transita sobre la línea de árboles. En todas partes la tiera y el agua están pobladas de aves comunes e inusuales, desde el magnífico cóndor, el ave terrestre más grande que existe, hasta las cotorras y picaflores más australes del mundo.

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